Las aves frugívoras son fundamentales para restaurar bosques saludables, pero la división de los bosques tropicales ha impedido el libre movimiento de aves grandes, limitando su capacidad para dispersar semillas y obstaculizando los esfuerzos para promover la regeneración natural de los bosques, restaurar la biodiversidad y secuestrar carbono.
Investigaciones anteriores establecieron la importancia de las aves para la biodiversidad forestal, pero los investigadores del Crowther Lab de ETH Zurich ahora tienen una comprensión cuantitativa de su contribución y han publicado sus resultados en Nature Climate Change.
La dispersión de semillas es esencial para el crecimiento
Las aves frugívoras desempeñan un papel vital en los ecosistemas forestales al esparcir las semillas de su sustento mientras navegan por el paisaje boscoso. Entre el 70 y el 90% de las especies de árboles se encuentran en los bosques tropicales y dependen de la dispersión de semillas por parte de animales, que es esencial para el crecimiento y funcionamiento de los bosques.
Centrándose en la Mata Atlántica de Brasil (una de las regiones con mayor diversidad biológica, pero también más fragmentada del mundo), los investigadores desarrollaron modelos utilizando datos terrestres para comparar el potencial de almacenamiento de carbono que podría recuperarse en paisajes con fragmentación limitada, con el de paisajes muy fragmentados.
